No todos los ladrillos son
iguales. Muy atrás queda aquella época donde en la mayoría de las
construcciones se empleaban ladrillos de arcilla. Actualmente, gracias a la
evolución tecnológica, existe en el mercado una gran variedad de tipos según
las necesidades y acabados que se requieran en cada momento. Desde Polvero
Valdezorras, como almacén de materiales
de construcción en Sevilla, queremos explicarte en el siguiente artículo
los distintos modelos que pueden encontrar en nuestras instalaciones:
Modelos para construcción
Cuatro son los tipos de ladrillos
más empleados en construcción, clasificándose en función de su resistencia y
material de fabricación.
Ladrillo de arcilla: como su propio nombre indica, está fabricado
–generalmente de manera artesanal– con este material cocido en horno. Su empleo
se remonta a hace siglos, por ello, es frecuente en edificios históricos (como
la Giralda, por ejemplo). Hoy en día, se utiliza para dar un aspecto añejo a
paredes o elementos decorativos.
Ladrillo perforado: se diferencia del primero en tener orificios
por los que penetra el mortero, con lo cual aporta más resistencia al muro
donde se utiliza. Habitualmente se suelen colocar de manera horizontal. Este
tipo junto con el siguiente, son los más empleados en construcción.
Ladrillo perforado en el canto: se distingue del anterior porque
sus orificios están abiertos en uno de sus lados, disponiéndose encadenados uno
tras otro para formar tabiques o techos, gracias a su ligereza. No obstante, en
la actualidad se emplean para este fin otros materiales como el poliestireno
expandido.
Ladrillos de adobe: están fabricados directamente por barro secado
al sol, por lo que es un material altamente delicado. Prácticamente, su uso ha
quedado reducido para la decoración de casas rurales o edificaciones con dicho
carácter, aunque es más que recomendable que se usen otros materiales más
resistentes para garantizar la vivienda segura.
Los ladrillos de estilo rústico son muy utilizados en decoración
Modelos para decoración
También existen en los almacenes
de materiales de construcción varios
tipos de formas y colores distintos. Se emplean tanto para suelos como para
paredes con fines exclusivamente decorativos.
Ladrillos cara vista: son aquellos ladrillos que están
especialmente tratados para que sus cantos queden expuestos al exterior. Si se
desea, se les puede aplicar encima un esmalte, barniz u otros productos como
aceite de linaza para un mejor acabado.
Ladrillos estilo rústico: se diferencia del anterior,
principalmente, en que sus bordes son imperfectos. Se pueden emplear tanto para
interior como para exterior.
Ladrillos para suelos: en el mercado existen diversos modelos según
su aspecto y color especialmente fabricados para tener una gran resistencia al
tránsito de personas. Se pueden emplear en multitud de lugares como jardines,
patios, parques… consiguiendo un efecto cálido y decorativo.
Milartienda
ResponderEliminarDecorar con obras de arte sobre paredes de ladrillo estilo rústico es una combinación encantadora. El contraste entre la textura cálida del ladrillo y la sofisticación del arte crea un ambiente acogedor y visualmente interesante.