jueves, 28 de octubre de 2021

Cómo mantener una piscina en invierno

Se acaban los días de calor y toca decir "hasta luego" a nuestra piscina en la que tantos baños nos hemos dado durante los últimos meses. Ahora quedan por delante varios meses de frío para los que debemos prepararla.


El mantenimiento de una piscina en invierno es sencillo y no supone un gran coste económico, pero es fundamental llevarlo a cabo para encontrarla en buen estado el próximo verano y, además, nos permitirá ahorrar tiempo, esfuerzo y dinero.

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Para ello, a continuación pasaremos a comentar las principales prácticas necesarias para mantener una piscina durante el invierno sin necesidad de vaciar el agua.


Consejos de mantenimiento de una piscina en invierno


Limpieza profunda del fondo y las paredes


Utiliza un cepillo para limpiar y retirar la suciedad de las paredes y el fondo de la piscina. Usa también un limpiafondos para evitar que queden depósitos. Recuerda también limpiar y vaciar los skimmers de los posibles residuos que puedan permanecer en ellos.


Cubre la piscina


Los cobertores para el invierno son más resistentes que los que se usan en verano y están hechos de poliéster recubierto de PVC. Gracias a ellos, se evita que caigan en el agua de la piscina, hojas, insectos, polvo y otros desechos.


Para prevenir posibles accidentes y caídas, asegúrate de que el cobertor queda bien anclado y tensado.


Comprueba el pH y el cloro del agua


Aunque no vayas a bañarte en ella, es importante asegurarse de que se mantenga en buen estado durante todo el invierno. Semanalmente, comprueba que el pH se encuentre entre 7,2 y 7,6.


Haz una cloración para eliminar la presencia de cualquier organismo vivo que pueda estar presente en el agua. Una vez hayan transcurrido 24 horas, añade al agua un producto invernador para tratarla durante el tiempo en el que la piscina va a permanecer sin uso. Apunta la fecha y recuerda repetir el proceso con la periodicidad que indique el fabricante en las instrucciones.


Apaga el motor de la instalación eléctrica


Esta práctica llevará aparejado un importante ahorro de energía. Eso sí, se recomienda encenderla una vez por semana durante dos o tres horas para que el agua circule por el sistema de filtrado y los equipos lleguen en buenas condiciones al siguiente verano.


Coloca las pastillas de cloro en los skimmers


Esta es la mejor manera de asegurarse de que la pastilla de cloro se disuelve y se distribuye correctamente en el agua de la piscina.


Durante el invierno, el agua apenas se mueve o circula, por lo que si durante esta época se introducen las pastillas de cloro en un dosificador flotante, es probable que quede parado en el mismo lugar durante semanas, tardando más la pastilla en disolverse y pudiendo producir manchas en la membrana.