martes, 26 de junio de 2018

Los mejores materiales para las tuberías de tu casa


En esta ocasión queremos hablaros de unos elementos que, aunque no se ven, resultan imprescindibles en toda vivienda: las tuberías. Saber elegirlas es vital para evitar problemas en el futuro como atascos o roturas (de hecho muchas obras de reformas son provocadas por este motivo). Desde nuestra experiencia como almacén de materiales deconstrucción en Sevilla sabemos qué demandan nuestros clientes habitualmente, y por ello, vamos a tratar de resolver sus principales dudas en este artículo.


¿Plástico o metal?


Lo primero que hay que tener en cuenta es que las tuberías se clasifican, principalmente, en dos categorías en función del material en el que estén fabricadas: plástico (pvc generalmente) y metal (cobre, plomo o hierro). Asimismo, también se diferencian en función de su uso, bien sea para drenar o conducir fluidos, agua y gas o bien para proteger cableados de electricidad.

Los factores que hay que tener en cuenta para elegir el modelo adecuado, entre otros, son:

- La durabilidad del material y su resistencia térmica.

- El coste de su instalación y mantenimiento (algunos requieren de mayores cuidados que otros)

- Posible toxicidad del material de fabricación

- Resistencia a los factores ambientales

No obstante, respecto a su uso, las tuberías de plástico o pvc suelen emplearse como desagüe, mientras que las de metal se escogen para suministros (agua, gas, etc.). En cuanto al precio, las canalizaciones de pvc y cobre, aparte de ser las más vendidas en nuestro polvero en Sevilla, son también las más económicas.

Tuberías de plástico


En ser las más empleadas para transportar líquidos de un lugar a otro ya que el pvc tiene una baja conductividad y cuenta con una alta capacidad de aislamiento. Además, es flexible, ligero y fácil de instalar, pues no requiere de soldadura. Los tipos más usuales son: PVC (para transportar agua fría, no caliente); CPVC (para conducir agua caliente); PEX (soporta temperaturas más elevadas) y Polipipe (muy empleado para conducir agua a presión).

Tuberías de metal


Las más comunes son las fabricadas en cobre, acero, acero inoxidable y galvanizado. El uso de una u otra depende del uso que se le vaya a dar, por ejemplo, las de cobre son las más recomendadas para la conducción de agua, gas y calefacción por su elevada resistencia a las altas temperaturas, durabilidad y su escaso mantenimiento. Incluso, estéticamente son cada vez más empleadas por decoradores que optan por dejarlas a la vista (sobre todo en obras de reformas de edificios antiguos). 

Otros tipos frecuentemente usados en la construcción son el acero (por su robustez es empleado para el transporte de gas aunque es más frágil a las condiciones ambientales que los restantes), acero inoxidable (muy útiles para canalizaciones cerca de la costa, puesto que no se corroen con el agua salada) y acero galvanizado (son las más caras, aunque tienen una gran dureza y capacidad inoxidable, por lo que, por lo general se emplean en instalaciones industriales).

Para terminar no hay que olvidarse de, sea cual sea la tubería adecuada, prestar una especial atención a su mantenimiento, sobre todo, al color del agua y aparición de humedades o azulejos desprendidos, las señales más frecuentes que nos indican que algo no va bien. Si hace falta, es recomendable acudir a empresas profesionales con servicio de localización de fugas o desatascos. Actualmente, hay técnicas que permiten localizar una fuga sin necesidad de ningún tipo de derribo. 

1 comentario:

  1. territorioagua.com
    Tener unas buenas tuberías y un tratamiento adecuado de las aguas domésticas es esencial para la salud y el medio ambiente. Preservar el agua y proteger nuestro hogar es responsabilidad de todos. ¡Bienestar y cuidado del planeta!

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